El proyecto parte de la idea de generar un espacio que, dadas las características del cliente, busca recrear situaciones diversas relacionadas a la experiencia hotelera y gastronómica.

Se trata de un espacio de desarrollo gastronómico privado para FEHGRA (Federación Empresaria Hotelera y Gastronómica de la República Argentina). La complejidad de resolver una gran diversidad de necesidades programáticas en tan solo 130m2 fue abordada mediante la estrategia de generar un recorrido ordenador cuyas decisiones de diseño y materialidad resuelven las diferentes situaciones de uso logrando una experiencia única e integradora.

Dicho recorrido propone atravesar distintas estaciones que incluyen una isla de barismo y cafetería, otra de coctelería, un sector de biblioteca especializada, un área de exhibición de productos (vajilla, accesorios, etc), una sala de cavas preparada para catas y degustaciones, y por último un auditorio que remata en una isla de show cooking equipada con tecnología de vanguardia en lo que refiere a equipos gastronómicos.

Cada una de estas estaciones está diseñada como una secuencia de bloques de granito que mediante su disposición y tamaño van recreando el paso de una isla a otra generando un paseo orgánico y monomaterial. Un cielorraso abovedado inspirado en las texturas y materialidad de las barricas de macerados y destilados unifica los espacios aportando al sentido de recorrido. Del mismo modo, la utilización de revestimiento entablillado de madera tratada

mediante la técnica de Shou Sugi Ban aparece en todo el recorrido del proyecto remitiendo con delicadeza y elegancia al quemado de madera en el fuego y la cocina. La iluminación general fue resuelta tanto con iluminación puntual como indirecta, pero sumando el diseño de unas piezas diseñadas para la ocasión y construidas artesanalmente que generan reflejos y destellos haciendo alusión al sentido onírico y festivo del mundo de los espumantes.