Estos «pasteles o tartas» también incluyen dos símbolos tradicionales de la pastelería, el colador y los batidores, ambos elementos los condensamos en una única pieza como símbolo.
El lenguaje de la arquitectura interior es una composición vernácula del típico estilo industrial derruido. De esta palabra “derruido” partió la idea de utilizar elementos que simulen un ámbito “under construction”, es decir, maderas de andamios, hierros de obra, tejidos metálicos. Todos materiales neutros que componen un universo de tamices constructivos y de fondo una casa derruida donde la vegetación seca toma posesión de una casa antigua que pareciera estar en un estado de abandono.
La iluminación se ha convertido en un elemento distintivo construido con soportes de estructura de madera y rodeado de vegetación seca, como un acto poético de cómo la vegetación puede tomar una estructura de andamiaje de madera abandonada.
En el primer piso, atravesando las simbólicas ventanas de madera y una gran vegetación que trepara por las mismas, encontramos un salón privado donde la alta coctelería toma presencia. Emulamos a través del simbólico árbol Lagerstroemia en el centro del patio y el uso de madera en torno al patio la idea de la casa en el arbol. De ahí su nombre Moshu treehouse.